Culpabilidad

-Por esto no duermo bien por las noches.
-Pues yo sí que duermo, ¿sabes cuál es la diferencia? La diferencia está en que yo tengo la conciencia bien tranquila.
-Tienes razón, tengo conciencia, me siento culpable.
-Lo sabía.
-Sí, me siento culpable de haber llegado a pensar que tú eras el responsable de mi sonrisa, que solo tú fueras capaz de acelerarme el corazón. Que de cada simple gesto yo hiciera un mundo. Que llegara a creerme como una tonta que era algo que nos pasaba a los dos. Me siento estúpida por no haberme podido ir a dormir sin haber hablado contigo antes. Y también de que fueras tú el único que hiciera que mis ojos se iluminaran de felicidad al verte. ¿Pero sabes de lo que más me arrepiento? De en algún momento haber llegado a sentir algo por ti. Eso es lo que más conciencia me da cada noche.