Algún tiempo después, decidisteis que vuestro tren tenía más de una avería y que era necesario soltar tu vagón. Y poco a poco tu presencia se fue difuminando de cada rincón. Sé que hay cosas que tienen difícil solución pero hasta la ecuación más complicada tiene respuesta. No sé si vosotros lo intentasteis, ya no importa, pero sea juntos o por separado quiero que os despertéis cada mañana con una sonrisa en la cara. Me gustaría que pensaseis que juntos vivisteis un bonito capítulo de vuestro camino el uno en el otro pero que ahora os toca escribir por separado. Y no pasa nada. Reinventaros a vosotros mismos.
En lo que llevo vivido ha habido algo que he aprendido, y es que: "Caerse es opcional pero levantarse es obligatorio". No sé si servirá de algo, pero aún así, yo sé que tarde o temprano lo lograréis. Igual que yo y el resto de la humanidad lo hemos hecho una y otra vez.